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Trelew: un exempleado municipal a juicio oral por regalar droga a estudiantes

Luis Martín Colin está preso en la Unidad 6. Lo acusan de entregar marihuana a menores. La imputación se agrava porque lo hacía cerca de varias escuelas, de una Comisaría y en plazas públicas. Compartía porros con los jóvenes: los esperaba a la salida de la escuela o lo buscaban en su casa.

Un exempleado de la Municipalidad de Trelew irá a juicio oral y público, acusado de entregar droga a menores cerca de al menos siete escuelas, de una Comisaría, de dos centros deportivos y en plaza públicas.

Se trata de Luis Martín Colin, que hoy está preso en la Unidad Penitenciaria 6 de Rawson pero que al ser detenido, en abril de este año, trabajaba en el área de Medio Ambiente dependiente de la Secretaría de Servicios Públicos. La elevación a juicio la firmó el juez federal de Rawson, Guillermo Lleral, a instancias del fiscal Fernando Gélvez. La fecha de las audiencias la definirá el Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia.

Según la imputación, entre el 26 de enero y el 7 de abril de este año, en Trelew, Colin habría entregado marihuana gratis a varios chicos. Actuaba principalmente en la Plaza de la Juventud, avenida Rawson y Pellegrini de Trelew; cerca de las escuelas provinciales N° 714, 712, 747, 206, 122 y 5; del Colegio María Auxiliadora; de la Comisaría Primera; del Gimnasio Municipal N° 1 y de la Plaza Independencia.

También lo habría hecho en Plaza Centenario, entre Lewis Jones, Sarmiento, Abraham Mathews y Urquiza; y en inmediaciones del Gimnasio Municipal N° 2. Colin también está imputado de haber hecho su reparto en el predio de la Secretaría de Turismo, Mitre y San Martín, en inmediaciones de la Plaza Independencia.

Se presume que los menores víctimas serían estudiantes de las escuelas secundarias cercanas. El caso surgió a raíz de un artículo periodístico que reveló chicos que se juntaban a fumar marihuana en las plazas.

Seguimiento

La Policía detectó que la mañana del 4 de abril de este año, en la Plaza de la Juventud, detrás del Concejo Deliberante, Colin se reunió con tres menores. Comenzó a fumar droga con una tuquera. Luego de encenderla, convidó a los chicos.

Esa misma tarde, Colin fue visto saliendo de su casa junto con otro menor que momentos antes lo había acompañado.
Fueron a Plaza Centenario, donde se les unió otro joven. Con un “pasamanos”, el acusado le entregó un porro que el chico guardó en un bolsillo de su campera. Momentos después, sacó el cigarrillo apagado y lo exhibió al grupo, con Colin presente. Al día siguiente, 5 de abril, el entonces empleado se encontró con dos menores para ir al predio de la Secretaría de Turismo.

Fumaron marihuana.

Según la acusación del fiscal federal, hubo varios incidentes similares. Los policías que lo siguieron declararon que Colin se contactaba con menores enfrente de la Escuela 714, en Plaza Centenario y el ex Distrito Militar. Siempre andaba por la calle con chicos y vivía en un conventillo de calle Urquiza, donde también iban menores.

Un efectivo contó cómo un joven fue a esa casa, vestido con camiseta de Boca Juniors, gorra, campera y buzo. Golpeó y silbó pero nadie atendió. Se retiró. Minutos después salió Colin con otro chico. Compraron cerveza cerca de la terminal de ómnibus y fueron a Plaza Centenario. Luego llegó el chico con ropa de Boca. El acusado le entregó presumiblemente estupefacientes. Se quedaron en la Plaza y luego fueron a comprar más cerveza.

En otra ocasión, Colin salió de su trabajo en el Concejo Deliberante. Recorrió comercios del centro y regresó a su casa de Urquiza. Salió al mediodía y fue al colegio detrás del Concejo. Se sentó en el paredón de la vereda hasta las 12.30, hora de salida de los chicos. Dos menores se acercaron a saludarlo y los tres caminaron al predio de Turismo. Se sentaron, armaron un cigarrillo y se pusieron a fumar.

Lluvia

Colin fue detenido el 7 de abril, en Italia y pasaje Jujuy. Lo trasladaron a la Comisaría Primera bajo una intensa lluvia. Lo requisaron: en su campera escondía tres porros.

El fiscal hizo notar que especialmente en abril, a Colin se lo vio siempre rodeado de menores pese a que no era su padre, profesor, tutor ni entrenador. “Les entregaba estupefaciente de manera voluntaria y deliberada, compartiendo en ocasiones el consumo de tal droga”.

Colin conocía la naturaleza de la marihuana que entregaba ya que era consumidor. Aguardaba que los jóvenes salieran de la escuela, esperándolos muchas veces enfrente de la Escuela 714 o en otras cercanos. Esto demuestra que sabía que eran menores, porque salían de la escuela.

Por Rolando Tobarez – DJ