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Silvina Batakis: “La política monetaria de Cambiemos es criminal”

La exministra de Economía bonaerense apuntó contra el Banco Central y las Lebac. Las propuestas para salir de la crisis.

La exministra de Economía de la provincia de Buenos Aires, Silvina Batakis, observa un presente muy malo y un futuro difícil de controlar si no se modifica la política económica. Dólar, inflación corrida cambiaria y propuestas para modificar el rumbo.

Tras dos meses de corrida cambiaria, ¿Qué propondría para evitar una nueva disparada del dólar? ¿Instrumentaría algún control de capitales?

Batakis: El control lo sugiere hasta el FMI para evitar el ingreso de capitales golondrinas. Pero trataría de bajar la presión del tipo de cambio a través del turismo. Debería haber un tipo de cambio diferencial por otros sectores. Y también más control de las importaciones. Hoy el mundo es distinto al de los años ’90. El mundo está más proteccionista y lo ves con la guerra entre Estados Unidos y China, Alemania, Canadá, Inglaterra. Estamos en otra sintonía. Hoy los países protegen la industria. Eso se hace con regulación. El Estado debe hacerlo.

– ¿Cómo amortiguaría el traslado a precios en el corto plazo? ¿Qué estrategia abordaría para bajar la inflación ?

– Hay que tener mirada de corto, mediano y largo. En 2015 en la campaña habíamos establecido un plan advirtiendo que es un tema muy complejo en la Argentina. El país no lo pudo controlar. La inflación se combate seriamente si abordamos la diversificación de la estructura productiva. En Argentina hay que diversificar la estructura productiva. Tenés la pampa húmeda como zona más fértil del mundo. Esa tierra genera una rentabilidad muy alta que no genera naturalmente la industria entonces se da una puja por la rentabilidad. Luego está la puja social por distribución de la riqueza. Si nosotros no resolvemos la diversificación de cada sector, es muy difícil combatir la inflación. Los procesos inflacionarios son multicausales. Eso es una mirada de largo plazo, no se resuelve inmediatamente. Veníamos en camino de resolverlo, pero faltaba mucho del lado de la oferta. Pero durante los últimos dos años y medio se atacó a la industria productiva.

– ¿Por qué la devaluación se traslada a precios?

– Cuando hay capacidad de ahorro el argentino trata de hacerlo en dólares. Porque sabe que la inflación hace que los ahorros no perduren en el tiempo. Pero por otra parte hoy hay una economía más dolarizada que en otros tiempos por la liberación del precio del combustible, el gas al mercado, las importaciones. Entonces tenés el mercado dolarizado.

– Cuesta creer que no lo hayan sabido. 

– Ellos venían con objetivos muy claros. Y luego tuvieron impericias. Tuvieron políticas de barbarie, como el caso de las Lebacs  y el BCRA. Fue una locura. No hay que permitir que los funcionarios que hicieron eso salgan del país. Es judicializable lo que hicieron. Ellos usan un instrumento que ya había sido creado por Duhalde. En esta miopía absoluta de creer que la inflación es proceso monetario metieron tasas hiper altas. A eso sumale la apertura indiscriminada de capitales. La riqueza que generamos se va al exterior o los que más tienen. Su objetivo era bajar los salarios en la Argentina. Bajar al punto de ser la India o México.

– ¿Cuánto tiempo mantendría las tasas en estos niveles? Si correspondiera, ¿cómo instrumentaría bajarlas?

– Tendría que ser un bono compulsivo a mediano y largo plazo en pesos, de ninguna manera en dólares. Hoy Argentina no puede salir al mercado internacional. Es necesario frenarlo para no tener inestabilidad cada 30 días. Hoy el gobierno rifa dólares que no tiene. Es criminal lo que le están haciendo a la población.

– Pasemos al déficit fiscal. ¿Sería más laxo o más agresivo con la reducción del déficit fiscal? ¿Cómo lo haría? 

– Las grandes crisis en la Argentina las producen los déficit externos. Ellos (el Gobierno) creen que debe haber un Estado mínimo. Cuando pasa eso ganan más los que más tienen. Los que necesitan al Estado presente son la clase media y baja. Usan el déficit como el problema pero no es tan distinto a otros países. El déficit fiscal del 2,3,5 por ciento son manejables. No era una bomba. Lo mejor es el superávit gemelo que solo sucedió con Néstor Kirchner. Lo ideal no es posible. Cuando enfatizan en el gasto público, buscan ocultar los ingresos para que no haya mas controles y así haya mas ganancias.

– En materia de impuestos, ¿Impondría derechos de exportación o retenciones al campo? ¿Qué otras opciones pondría sobre la mesa?

– Les sacaron más impuestos a los más rentables y eliminaron los IIBB que son los mas progresivos. En Buenos Aires, por ejemplo, aumentaron muchísimo los impuestos. Con las retenciones hay que entender que no es un invento argentino, está en cientos de países. Una variable es recaudar en dólares. Eso es a través de las retenciones. Esas exportaciones se usaban para el servicio de pago de deuda. Eso es una cualidad. La otra es que rompe el precio interno y el externo. Cuando se sacan las retenciones del maíz suben los precios del pollo y el cerdo. Es matemático. El productor, cuando compraba maíz hasta diciembre de 2015 sabía que el precio internacional era X. Pero en Argentina era X menos la retención. En cambio, con la quita del impuesto ahora el precio es X. Osea te contenía la inflación. Eso se llama política económica.

– Respecto a la deuda externa. ¿Mantendría el acuerdo con el FMI? ¿Buscaría financiarse con el mercado local?

– El primer acuerdo con el FMI se firmó en 1956 con un gobierno militar. Tiene carácter ya de convenio internacional y no tiene cláusula de salida. No así los programas económicos que impone. El gobierno dejará el BCRA prácticamente fundido. El acuerdo con FMI dice las reservas reales del BCRA giran en torno a los 20/24 mil millones de dólares. La deuda se devolverá a mediano/largo plazo.

– Sobre la Energía y el debate de las tarifas ¿Mantendría los contratos vigentes con las compañías energéticas? ¿Qué propone?

– Hay que volver a regular el precio de los combustibles. Debe ser un servicio total del Estado. Había errores en los sistemas tarifarios que teníamos. Pero lo que se hizo ahora es terrible. El problema es que los nuevos contratos blindaron a las empresas.

– Las paritarias perdieron frente a la inflación ¿Permitiría una revisión salarial hasta igualar la devaluación?

– Los salarios deben ir por encima de la inflación. Es uno de los motores de la Economía, no es solo ideológico. Hoy lo que pasa es que se quiere bajar el salario de los argentinos y disminuir la planta de Estado. Hoy el sector privado está muy mal, eso no es novedad. Pero es producto de las malas políticas.

– Por último ¿Qué sectores potenciaría pensando en un modelo de desarrollo a largo plazo? ¿Qué variables macroeconómicas clave debería resolver el país para asegurar crecimiento sostenido?

– El sector agropecuario debería ser una de las llaves de algún sector de inteligencia agregada que motorice a la Argentina. Ejemplo: la genética animal. Es un asunto que debería ser liderado en el mundo por nosotros. Colombia, que tiene menos ganado bovino, hizo un desarrollo genético que hoy vende al mundo. Necesitamos ser líderes para pujar una cadena productiva. El campo agrega valor. Muchísimo valor, pero hay que potenciarlo. Y por supuesto el sector industrial en general, porque Argentina siempre tuvo pretensiones industrialistas y ahí hay trabajo de calidad. Sobre las variables macro, hay que atender urgente el sector externo. Tenemos un déficit de la balanza comercial terrible. Hay que ir por ahí rapidamente.

Por Ramón Indart