El líder de La 12 regresó a la Argentina luego de ser expulsado de Paraguay por desmanes en el marco del partido entre Boca y Cerro Porteño. “Nadie se preocupó por nosotros”, se lamentó.
Rafael Di Zeo, jefe de la barrabrava de Boca, y varios de sus compañeros regresaron esta tarde a Buenos Aires desde Paraguay luego de ser liberados de la cárcel y fueron recibidos en Aeroparque con cánticos por parte de un grupo de hinchas xeneizes.
“Nos discriminaron y nos metieron presos por nada”, se lamentó Di Zeo frente a la prensa presente en el lugar. “Nadie se preocupó por nosotros, fue lamentable. Acá se preocuparon solo el cónsul y un amigo que tenemos allá y estuvo todo el tiempo con nosotros”.
“En este país no defienden a la gente. Nos tendrían que haber defendido ustedes como argentinos” les dijo el líder barrabrava a los periodistas, explicando también que la policía paraguaya los emboscó. “Nos llevaron por un camino que no debía y de la nada nos empezaron a tirar cascotes de todos lados”, relató.
Los barras de Boca volvieron luego de ser expulsados de Paraguay y condenados a no retornar al país vecino por un período de dos años.
Desmanes
Di Zeo y sus compañeros de La 12 protagonizaron desmanes violentos en las inmediaciones del estadio Defensores del Chaco de Asunción, durante la previa del encuentro que Boca le ganó a Cerro Porteño por 2 a 1 por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores.
Los barrabravas responsables del ataque fueron detenidos y encarcelados durante 11 días antes de que se ordenara su expulsión del país. Además de Di Zeo, en el grupo de hinchas que terminaron entre rejas estaba Mauro Martín, también líder de La 12.