Sergio Palazzo, secretario general de la Asociación Bancaria, insultó al ministro de Energía, Juan José Aranguren en una cumbre gremial.
Si los exabruptos fueran indicadores del malestar social generado por los ajustes tarifarios, el de Sergio Palazzo, secretario general de la Asociación Bancaria, al repudiar al ministro de Energía, Juan José Aranguren, estaría indicando que la tensión está llegando al extremo.
Palazzo habló en la clausura del Congreso Nacional Bancario, recordando que el ministro, en su presentación en la Cámara de Diputados para defender los aumentos de tarifas, había admitido que el gobierno estaba “aprendiendo”.
Furioso, el dirigente bancario se despachó a gusto con toda su artillería verbal: “Andá, Aranguren, a hacer prueba y error con la puta madre que te remil parió, no con los trabajadores”.
Como era de esperar, los presentes, entre ellos los referentes cegetistas Hugo Moyano y Luis Barrionuevo, aplaudieron la olímpica puteada del anfitrión.
También el ministro de Economía, Alfonso Prat Gay, fue blanco de la ira del bancario, quien repudió el viaje del funcionario a España a pedir perdón por la expropiación de YPF: “Lo único que le faltó fue pedir disculpas por haber destronado al virrey Cisneros”, ironizó.
La escalada verbal de Palazzo apuntó también al presidente Mauricio Macri,
señalando que “el gobierno pasó a ser un aguantadero de CEOs de las multinacionales, porque un empresario llegó al poder”.
En el capítulo de la corrupción, el gremialista tampoco ahorró munición gruesa: “Me da mucha bronca ver cómo cuentan billetes descaradamente en La Rosadita producto de los actos de corrupción, me da indignación ver cómo revolean millones de dólares en un convento. Pero esto se usa para no mostrar la otra realidad, porque son tan corruptos los que tiran bolsos en un convento, como los que tiran bolsos en la puerta de Shell pagando precios desorbitantes al gas y al combustible”.
En el evento, realizado en el auditorio Malvinas Argentinas, de La Bancaria, Palazzo firmó un documento reclamando la “reapertura de la paritaria” de su gremio.
El documento, también refrendado por las tres fracciones de la CGT y las dos de la CTA, plantea “la recuperación gremial de la agenda de discusión de los grandes temas nacionales”, ratificando “el camino de unidad del sindicalismo” y rechazando “el ajuste, los tarifazos y el neoliberalismo”.
Señalado como uno de los eventuales candidatos a conducir la próxima CGT unificada, Palazzo también deploró la corrupción K y la del actual gobierno, deslizando que tienen puntos de contacto.