Chubut Para Todos

Martín Lousteau: “Si apoyar al Gobierno es decir todo que sí, entonces no lo apoyo”

La candidatura de Martín Lousteau podría ser la piedra en el zapato del oficialismo. Con la UCR y el socialismo asociados en “Evolución Ciudadana”, Lousteau le competirá a Carrió y “Vamos Juntos”, la alianza entre el Pro y la Coalición Cívica.

“Yo tenía una vida extraordinaria como embajador en Washington y la dejé para venir a intentar que exista una primaria y fortalecer Cambiemos, a hacer una elección difícil, donde se supone que el otro te duplica en votos. ¿Eso es mezquino? Y cerrar la primaria y elegir los candidatos a dedo y no preguntarle a la gente sobre la gestión en la Ciudad ¿eso no es mezquino? ¿Quién es el mezquino, Larreta que no autoriza la primaria o yo?” dice Martín Lousteau en una charla con LPO en la que confirma que intentará complicarle la vida al macrismo una vez más en la ciudad que lo vio nacer.

El ex embajador en Estados Unidos cuestiona a Elisa Carrió, no duda en afirmar que su aliada de 2015 “se sometió al marketing de Durán Barba” y denuncia que Lilita aceptó callar durante la campaña que ya comienza. Apunta contra Horacio Rodríguez Larreta, cuestiona el ejército de trolls que conduce (el jefe de Gabinete) Marcos Peña. Además, opina que Cambiemos es más sesgado cuando se parece al PRO y lanza un desafío hacia la jefa de la Coalición Cívica: “Ella siempre se vanaglorió de hacer campañas austeras. ¿Esta campaña del PRO en la ciudad va a ser austera?”.

¿Por qué renunció a la embajada en Estados Unidos y volvió a ser candidato?

Renuncié para cumplir con lo que dijimos muchas veces, no sólo a los votantes sino también cuando el Presidente me ofreció el cargo: siempre le dije que tenía la vocación de volver a competir, desde el primer día. Lo hablamos muchas veces.

¿Estaba claro entonces que asumía para renunciar un año y medio después o la idea era otra?

No, no. Nosotros teníamos que sopesar qué es mejor: seguir acumulando experiencia en la gestión o volver a refrendar el compromiso en una elección y decidimos esto. Cuando me fui, no sabía que volvía en este turno electoral.

El gobierno dice que usted no cumplió con el compromiso de la función pública.

Pero si cada dos meses tuve esta conversación con el Presidente y con Marcos Peña, de cómo venía el país y la elección de la ciudad. Siempre dije que nuestro espacio ECO iba a estar representado en las elecciones. Lo que no podía ocurrir es que no hubiera primarias.

Ellos tienen una visión muy particular: Cambiemos existe, pero siempre y cuando una parte de Cambiemos no pueda elegir a su candidato.

Pero el macrismo no le permitió competir dentro de Cambiemos.

Ellos tienen una visión bastante particular: que Cambiemos existe pero siempre y cuando una parte de Cambiemos no pueda elegir su candidato.

¿Hoy apoya al gobierno nacional?

Lo apoyo como lo apoyan todos los argentinos. Si apoyar es acríticamente, si es no criticar, si es no proponer, entonces no. Si es tratar de que le vaya mejor y ayudarlo a mejorar la gestión, sí. Siempre discrepé con la idea de que ayudar a un gobierno -desde adentro o desde afuera- sea decirle todo que sí.

¿Se puede fortalecer a Cambiemos y ser opositor al PRO, como usted pretende?

Sí, claro, porque Cambiemos y el PRO son cosas distintas. Cambiemos no es mejor con el PRO solo, no tiene mejor diagnóstico de la realidad ni hace las cosas mejor. Cuando Cambiemos se parece más al PRO, es más sesgado, es más cerrado en la manera de percibir la realidad y en la manera de resolver los problemas.

Carrió, la candidata del PRO

Carrió, que lo respaldó en 2015, ahora dice que lo suyo es de una “mezquindad horrible”.

¿Por qué? Yo vivía en Washington como embajador, la verdad que es una vida extraordinaria. Dejé esa vida. ¿Venir a intentar que exista una primaria para fortalecer Cambiemos, a hacer una elección que siempre es difícil, cuando se supone que el otro te duplica en votos, es mezquino? Y cerrar la primaria y no tenerla y elegir los candidatos a dedo y no preguntarle a la gente sobre cuestiones de gestión en la ciudad ¿eso no es mezquino? ¿Quién es el mezquino, Larreta que no autoriza la primaria o yo?.

Depende ¿fortalecer un gobierno pasa por apoyar o por criticar?

La generosidad o mezquindad se mide en el grado de compromiso para ayudar a mejorar las cosas, y muchas veces en poner el cuerpo, eso es, aceptar la gestión. Es muy fácil señalar de vez en cuando desde afuera pero no aceptar la gestión para mejorar desde adentro. Señalar desde afuera protegiéndote a vos misma de los errores del gobierno. Carrió se preserva a sí misma, señalando algunas cosas, callando otras, pero diciendo ‘ninguno de los errores del gobierno es mío’ y todos los aciertos son de ella.

El ideólogo Durán Barba

¿Por qué dice que Carrió se sometió al marketing de Durán Barba?

¿No es así? Hace campaña pautada. ¿No dice de esto no se puede hablar? Durán Barba es el principal asesor de Rodríguez Larreta y la campaña de la Ciudad tiene mucho del estilo original del PRO. Ella dice de esto en la campaña no voy a hablar y va y se saca las fotos en las obras, con el mismo tipo de foto que se sacaba Larreta con Santilli. ¿Ese no es el marketing del PRO, las pautas de campaña del PRO?

Carrió se sometió al marketing de Durán Barba, se saca las mismas fotos en las obras que se sacaba Larreta con Santilli ¿Ese no es el marketing del PRO, la campaña del PRO?

Hasta hace poco Carrió figuraba entre los detractores de Durán Barba.

¿Y ahora? Están todos en la teoría de la grieta de Durán Barba, ella incluida. Después ella, cada tanto, cuando no quiere quedar pegada con algo, dice alguna cosa, de manera bastante selectiva. Así como antes decía cosas que ahora no dice.

Ella sería una pieza más de esa estrategia.

No, no es una pieza más porque es una voz muy potente de la política argentina, con la cuál puedo discrepar, pero la respeto mucho. La estrategia de polarizar, de la grieta, de mirar el pasado, es la estrategia de Duran Barba. Y otra cosa. Carrió siempre se vanaglorió de hacer campañas austeras. ¿Esta campaña del PRO en la ciudad va a ser austera? Quiero ver. ¿Va a ser una campaña Carrió o va a ser una campaña PRO?

Durán Barba dice que “lo de Lousteau es insólito” porque busca comandar una fuerza que siempre combatió.

Durán Barba tiene una confusión gigantesca en su cabeza entre el PRO y Cambiemos. El cree que el PRO armó Cambiemos cooptando espacios a los que después no tiene que prestarles atención. Y yo creo que Cambiemos es de la gente que lo vota, que depositó en Cambiemos cosas que van mucho más allá del PRO. Durán Barba piensa que el PRO se tiene que comer a los demás espacios de Cambiemos y que nadie puede opinar distinto. Que el marketing prevalece sobre concepciones ideológicas, filosóficas y de gestión. Yo discrepo y ahora veo que Carrió coincide con Durán Barba. Antes le parecía un horror.

El marketing del PRO

¿En el oficialismo se critica a Durán Barba para no cuestionar a Macri?

Yo no hago eso. Al PRO en la ciudad, en el 2013, en el 2015, en cómo usa la publicidad oficial, en la estética de la campaña, en cómo trata de manipular, siempre lo critiqué. Critico a ese espacio político, no soy PRO. El que las representa cabalmente porque está contratado para eso es Durán Barba: es el que va comandando, es el ideólogo de eso, pero la crítica es al PRO.

¿Por qué dice que la gestión de Rodríguez Larreta es “cemento y marketing”?

Porque hace un montón de obra -alguna muy buena, otra innecesaria-, la levanta y la vuelve a hacer y se gasta fortunas en marketing y publicidad oficial.

¿Dice que faltan controles sobre la obra pública?

Claro que nadie lo controla, pero el mejor instrumento a la larga es la posibilidad de alternancia en el poder. Porque si vos tenés una fuerza hegemónica y otra que no puede acceder a la Jefatura de Gobierno, lo que ocurre es que finalmente negocian. En cambio, si hay posibilidad de alternancia, hay un control mucho más riguroso y sostenible en el tiempo.

Durán Barba tiene una confusión gigantesca entre el PRO y Cambiemos. El cree que el PRO armó Cambiemos cooptando espacios a los que no hay que prestarles atención y piensa que el PRO se tiene que comer a los demás espacios.

ECO en la Legislatura acompañó muchas veces al gobierno de Larreta.

Si.

¿Negocian gobernabilidad a cambio de cargos, como afirman desde La Coalición Cívica?

Es llamativo. Cuando tienen que justificar por qué no hay Cambiemos en la Ciudad es porque nosotros no acompañamos las cosas. Eso dicen Rodríguez Larreta y Santilli. Acompañamos lo que nos parecía bien, mejoramos otras y no votamos lo que era contrario a nuestros principios y esas cosas a Rodríguez Larreta lo enojan mucho.

¿Cuáles?

No hemos querido que se tratara ni siquiera Solares de Santa María. Hay un montón.

Apoyaron otros negocios inmobiliarios como el de Catalinas o la Villa Olímpica.

Votamos a conciencia. Catalinas sí porque nos parece bueno, el Paseo del Bajo no, Villa Olímpica votamos una parte. Coalición Cívica y nosotros votamos muchas veces parecido.

El capitalismo de amigos

En 2015, criticó la relación del PRO con los proveedores del Estado. ¿Cómo lo ve ahora?

No cambió nada. Lo criticaba también la Coalición Cívica.

Nicolás Caputo obtuvo en un año contratos por 500 millones de pesos, la mitad de lo que había obtenido en los 8 años de Macri.

Me parece un desastre, mal, hay conflicto de intereses, hay falta de transparencia, no hay precio testigo, no hay expediente digital y público. Lo criticamos antes y lo seguimos criticando ahora. La Coalición Cívica ¿qué piensa de eso?

No lo nombra mucho últimamente. ¿De quién es la responsabilidad en el caso de Caputo?

Del jefe de Gobierno.

Sin embargo, la relación de Caputo es con Macri.

Es el Gobierno de la Ciudad el que decide, el que licita y el que adjudica. Es un conflicto de intereses que se repite en un montón de ámbitos, incluso en el gobierno nacional. Lo escribí en una nota que no les gustó.

El último radical

¿Usted es el último político que intenta reconciliar al radicalismo con el poder?

No, el radicalismo es poder en Jujuy, es gobierno en Mendoza.

¿Es el mismo radicalismo que lo respalda a usted?

Sí. A mí me apoya el radicalismo nacional. Mirá la Convención, lo que acaban de firmar los órganos partidarios, mirá el documento firmado por José Corral.

Pero Ernesto Sanz no lo apoya.

Ernesto Sanz ¿qué rol cumple? Él puede hacer lo que quiere. No ocupa ningún cargo. Es parte de la mesa que se sienta con el gobierno, pero no representa al radicalismo en sus decisiones.

Los contratos a Caputo me parecen un desastre, mal, hay conflicto de intereses, hay falta de transparencia, no hay precio testigo, no hay expediente digital y público. Lo criticamos antes y lo seguimos criticando ahora. La Coalición Cívica ¿qué piensa de eso?

¿Cómo se explica el viaje a Tucumán en el que se mostró con Manzur y Alperovich?

Me hicieron un reconocimiento la Legislatura de Tucumán, la cámara citrícola y los trabajadores del limón y en la noche previa me invitaron a un asado el gobernador, el vicegobernador y su gabinete. Llegó Alperovich, que es senador nacional, se sacó una foto y la subió a Twitter.

Manzur y Alperovich son los enemigos del radicalismo de Cano.

Sí, pero es un reconocimiento institucional, no tengo nada que ver con Alperovich, todo el mundo lo sabe. La diferencia es que cuando yo me junto con alguien no tengo controlada ni prepautada mis fotos y después no tengo un ejército de trolls para viralizar las buenas o las malas. No voy con ese ejército que hace un montaje y después el fotomontaje y el photoshop y después las trollea.

¿Eso es Macri?

Eso es Marcos Peña.

No lo nombra mucho últimamente. ¿De quién es la responsabilidad en el caso de Caputo?

Del jefe de Gobierno.

Sin embargo, la relación de Caputo es con Macri.

Es el Gobierno de la Ciudad el que decide, el que licita y el que adjudica. Es un conflicto de intereses que se repite en un montón de ámbitos, incluso en el gobierno nacional. Lo escribí en una nota que no les gustó.

El último radical

¿Usted es el último político que intenta reconciliar al radicalismo con el poder?

No, el radicalismo es poder en Jujuy, es gobierno en Mendoza.

¿Es el mismo radicalismo que lo respalda a usted?

Sí. A mí me apoya el radicalismo nacional. Mirá la Convención, lo que acaban de firmar los órganos partidarios, mirá el documento firmado por José Corral.

Pero Ernesto Sanz no lo apoya.

Ernesto Sanz ¿qué rol cumple? Él puede hacer lo que quiere. No ocupa ningún cargo. Es parte de la mesa que se sienta con el gobierno, pero no representa al radicalismo en sus decisiones.

Los contratos a Caputo me parecen un desastre, mal, hay conflicto de intereses, hay falta de transparencia, no hay precio testigo, no hay expediente digital y público. Lo criticamos antes y lo seguimos criticando ahora. La Coalición Cívica ¿qué piensa de eso?

¿Cómo se explica el viaje a Tucumán en el que se mostró con Manzur y Alperovich?

Me hicieron un reconocimiento la Legislatura de Tucumán, la cámara citrícola y los trabajadores del limón y en la noche previa me invitaron a un asado el gobernador, el vicegobernador y su gabinete. Llegó Alperovich, que es senador nacional, se sacó una foto y la subió a Twitter.

Manzur y Alperovich son los enemigos del radicalismo de Cano.

Sí, pero es un reconocimiento institucional, no tengo nada que ver con Alperovich, todo el mundo lo sabe. La diferencia es que cuando yo me junto con alguien no tengo controlada ni prepautada mis fotos y después no tengo un ejército de trolls para viralizar las buenas o las malas. No voy con ese ejército que hace un montaje y después el fotomontaje y el photoshop y después las trollea.

¿Eso es Macri?

Eso es Marcos Peña.

La Coalición Cívica y un sector del radicalismo lo critican por sus aliados, Emiliano Yacobitti, Enrique Nosiglia y Chrystian Colombo. ¿Qué responde?

Yacobitti es el presidente del radicalismo porteño, el mismo con el que ellos hicieron campaña dos veces, el mismo que Carrió denunció después de una nota periodística y la denuncia fue desestimada: lo saben sus legisladores. Colombo es amigo mío, es una persona que consulto y respeto su visión. Coti Nosiglia tiene una trayectoria muy importante en la política, lo consultan todos y lo ven todos, incluyendo el gobierno nacional: fue un actor importante a la hora de constituir Cambiemos y de llevar al radicalismo a Cambiemos. Hablo con Nosiglia como hablan un montón. ¿Determina lo que yo hago? De ninguna manera.

¿Quién consulta a Nosiglia en el gobierno nacional?

Desde el jefe de Gabinete para abajo.

Me impresiona el principismo selectivo del Gobierno: ¿Porqué no miran el rol que tiene Carlos Grosso en la mesa de decisiones, pese a tener un prontuario impresionante? ¿Porque son unos hipócritas?

¿No es un monje negro, como se suele decir?

Un monje negro sería alguien que tiene poder, llega a mucha gente pero no tiene un cargo. ¿Sería como Carlos Grosso en el gobierno nacional?

Sí.

Bueno, Grosso tiene otro rango y otro prontuario.

Son figuras que podrían emparentarse por las etapas que atravesaron y la influencia que conservan.

Porque han colaborado con la formación de Cambiemos. Puede ser que los dos sean armadores y hayan participado de distintos armados, desde Boca hasta otros armados. Los dos son reconocidos como gente que tiene una visión sofisticada de la política pero Grosso tiene un prontuario impresionante y está incorporado al gobierno nacional a la hora de la toma de decisiones políticas. Me llama la atención este principismo selectivo del gobierno. ¿Por qué no miran a Grosso, que tiene realmente problemas? Porque son unos hipócritas.

La economía de los CEOS

¿Coincide con los que dicen que este es un gobierno de CEOS?

Tiene muchos CEOS pero yo creo que el Estado tiene que mejorar su capacidad de gestión. Está bien que entren CEOs pero también es cierto que el Estado es muy distinto a una empresa. En el Estado hay 44 millones de accionistas, los procesos de toma de decisión son muy distintos. Un CEO puede tener una experiencia muy buena pero puede pensar de manera errada la forma de transitar el Estado y entonces cometen errores.

Usted trabajó con Lopetegui. ¿Es parte de los CEOS que no entienden la diferencia entre empresa y Estado?

Algunos lo entienden y otros no. Tengo un gran aprecio y respeto por Gustavo y me parece una persona muy inteligente, que tiene una visión amplia de un montón de cuestiones.

¿Por qué dice que hay un déficit de 7 puntos del PBI?

Gobierno nacional y provincias, el déficit primario y el déficit financiero, que es la cantidad de plata que necesitás ir a buscar, eso es 7 por ciento del PBI.

¿Cuál es su recomendación?

Tenés que discutir el Estado en serio y para eso no podés generar grieta. Y ahí es donde los CEOS generan problemas.

¿Usted ve un riesgo de cesación de pagos, como advierten algunos?

No podés continuar con este nivel de endeudamiento in eternum. Eso está claro.

¿Y ve una estrategia del gobierno para salir de ese círculo de financiar déficit con deuda?

Para mí la única estrategia es discutir en serio el Estado y eso afecta intereses. Para afectar intereses, tenés que sentar a la mayor cantidad de actores en la mesa, y para eso tenés que salir de la grieta.

Pero el macrismo vive de la grieta.

Bueno, para mí es un error. Yo creo que ayudo más diciendo estas cosas y peleando contra la grieta que señalando al primo del Presidente.

¿A cuál de los primos? ¿Jorge Macri o Ángelo Calcaterra?

¿A quién define Carrió como un delincuente, a quién señala? A Jorge. Dijo que es un delincuente. Yo creo que contribuyo más discutiendo estos temas y si es un delincuente que se ocupe la Justicia, no voy a caer en definiciones mediáticas.