Reinhard Marx, presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, contó que se pretendió ocultar “actos terribles” y encubrir a los responsables
“Los procedimientos y trámites fijados para perseguir esos delitos fueron deliberadamente ignorados, e incluso borrados o anulados”, insistió.
“De hecho, los derechos de las víctimas fueron pisoteados y dejados al libre albedrío de individuos”, denunció el cardenal Marx.
El purpurado alemán, conocido por sus posiciones progresistas, criticó que el “secreto pontificio” sea presentado a menudo como una justificación por la Iglesia y peor aún en casos como el de los abusos sexuales perpetrados por curas.
El cardenal pidió una mayor transparencia sobre los juicios que lleva a cabo la Iglesia y exigió que se divulguen el número de casos examinados por los tribunales eclesiásticos y detalles sobre los mismos.