El gobernador de Córdoba se reunirá mañana al ex presidente norteamericano en un encuentro privado antes de la Cumbre de Economía Verde.
En la guerra de egos que implica la política, esta vez el gobernador de Córdoba Juan Schiaretti logrará el bronce: recibirá antes que Mauricio Macri al ex presidente de Estados Unidos Barack Obama y mantendrán una breve reunión a solas en el Hotel Quorum de la capital cordobesa.
El gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, fue uno de los oradores de la apertura de la segunda Cumbre de Economía Verde, que culmina este viernes en el Hotel Quórum de esta capital.
En su discurso, el mandatario celebró la visita a nuestra provincia del ex presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
“Es un orgullo que Obama haga su primera visita a Latinoamérica en nuestra Córdoba. Bienvenidos”, señaló.
La cumbre tiene como objetivo la formación de 300 líderes de opinión en economía verde y el desarrollo sustentable. Para lo cual participan nuevamente especialistas y referentes del sector.
Además de Obama -quien obtuvo el premio Nobel de la Paz en el año 2009- disertan Eric Maskin, economista y ganador del Premio Nobel de Economía en 2007 por haber sentado las bases de la teoría de diseño de mecanismos, una rama de la teoría de juegos y Edmund Phelps, economista y también Nobel de Economía en 2006 por sus análisis sobre compensaciones internacionales en la política macroeconómica.
Phelps, en su apertura, aseguró: “Nos queda mucho por hacer. Las metas requieren un respaldo más alto de la sociedad. El clima ya se ha deteriorado, se ha convertido en muy costoso y muy peligroso. La temperatura ya se ha modificado. Los Océanos alcanzaron niveles que ponen en riesgo a las poblaciones costeras. El daño afecta al medioambiente y a las industrias”.
“Recuperar parte de ese capital natural dañado incrementaría la tasa de retorno del sector industrial, y estas invertirían mas, haciendo un mayor esfuerzo. Pueden crecer de manera conjunta. El mundo debe abandonar la aspiración de un crecimiento económico rápido. Queremos una mejora del ambiente sin interrumpir el crecimiento económico”, señaló.
“Se estima que el 20% de la población mundial representa el 80% del consumo de los recursos naturales. Aquellas naciones que lideran la lucha por el ambiente, deben ser duras con aquellas que no lo hacen”, continuó.
Y agregó: “¿Cómo una economía verde puede impactar en salario y trabajo? Las nuevas fuentes de energía han abierto nuevos empleos, mientras otras, como la del carbón, lo fue reduciendo. El aumento neto se verá en la medida que las nuevas industrias aporten algo especial a la economía. Debemos revivir el mundo en una relación creativa y decorosa con el trabajo”.
“Mi preocupación es que nuestras economías nacionales están muy reguladas, y se regulan en nombre de la economía verde, pero tampoco hay que regularlas de más. No hay que caer en el estrangulamiento que hacen nuestra vida posible”, completó el premio Nobel de Economía en 2006.