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Hijos de desaparecidos ocupan los cargos de sus padres en el Estado

La Comisión de Trabajo por la Reconstrucción de Nuestra Identidad recupera los legajos de trabajadores de dependencias públicas que fueron secuestrados y desaparecidos, y ofrece a sus hijos una salida laboral en esas áreas.

Por el trabajo de la Comisión de Trabajo por la Reconstrucción de Nuestra Identidad, que se encarga de la reparación de los legajos de los trabajadores y trabajadoras que fueron secuestradas durante la dictadura cívico militar, ya son 28 los hijos de detenidos desaparecidos que ingresaron a trabajar en las dependencias del Estado en las que se trabajan sus padres al momento de ser secuestrados.

Con la reparación de estos legajos de desaparecidos, en los que nunca había constado que la desvinculación laboral se debía a una desaparición por la dictadura, la Comisión “recupera la identidad de los trabajadores del Estado detenidos desaparecidos, repara sus legajos y los entrega a sus familias”.

Así lo explicó a Télam Julián Scabbiolo, coordinador de la Comisión que funciona bajo la órbita del Ministerio de Obras y Servicios Públicos. Las incorporaciones se gestionan tras la presentación de un pedido a la Comisión, quien se encarga de tomar contacto con cada jurisdicción, organismo y empresa pública a fin de comenzar una investigación.

Según detalló Scabbiolo, hubo ingresos laborales en áreas como Ferrocarriles, AFIP, Aduana , Enohsa, Aysa, Administración General de Puertos, Ministerio de Trabajo, PAMI y Anses.

“La reparación y la memoria son un impulso que reconstruye los lazos sociales y culturales que trató de destruir el terrorismo de Estado”, explicó el coordinador de la Comisión, y señaló que aunque no se trata de una obligación por ley que sus familiares ingresen al Estado, “se trata de una obligación moral y ética” vinculada a la reparación histórica.

Charly Pisoni, referente de la agrupación H.I.J.O.S, sostuvo que el trabajo que hacen en la reparación de los legajos “muestra cómo las personas habían interrumpido la relación laboral porque habían desaparecido, incluso muchos, en sus lugares de trabajo”.

Además, manifestó, “apoyan a encontrar una salida laboral que por ahí hubieran tenido los descendientes, si sus padres hubieran seguido con vida”.