Chubut Para Todos

El Dinosaurio más grande del mundo, encontrado en Chubut, se exhibe en Nueva York

Fue hallado en 2013 y lo exhiben en el Museo de Historia Natural de Manhattan. Vivió hace unos 100 millones de años y medía 40 metros de la cola a la cabeza.

El Museo de Historia Natural presentó al nuevo miembro de su famosa sala de fósiles, que destronó a la mítica ballena azul, un ícono del museo, y se convirtió en el animal más grande en exhibición. Hubo una cuenta regresiva, una cortina negra se corrió como si fuera un telón delante de las cámaras y los teléfonos que estaban listos para inmortalizar el momento, y el titanousario, cuyo nombre aún se desconoce, apareció asomando su cabeza hacia fuera de su galería: es tan grande que ni siquiera entró en la sala.

La réplica del esqueleto del titanousaurio fue creada en seis meses por la empresa Richard Casting International en Ontario, Canadá, con piezas de fibra de vidrio producidas por impresoras 3-D. Los científicos trabajaron con imágenes digitales diseñadas a partir de 84 de los 223 fósiles hallados en el campo La Flecha, en el paraje El Sombrero, en Chubut. El primer fósil fue descubierto por un peón, Aurelio Hernández, en una de sus habituales recorridas por el campo.

El titanousario tiene 37 metros de largo, nueve metros más que la ballena azul. Es un hervíboro gigante que, según infieren los paleontólogos, pesaba alrededor de 70 toneladas, tanto como diez elefantes africanos. Vivió en la Patagonia hace alrededor de 100 millones de años, durante el período Cretácico. Ahora, vive en Manhattan.

La llegada del titanousario a la Gran Manzana fue un hito para la ciencia argentina. Además, mostró el alcance de la cooperación científica entre países, instituciones y empresas de América. La presidenta del museo, Ellen Futter, agradeció a Cúneo y Pol por la colaboración, y Cúneo dijo que la exhibición había marcado una “nueva conexión entre el sur y el norte”.

“Es una vidriera excepcional para la ciencia argentina, y para el país en general”, enfatizó Pol, para quien la presentación significó también un regreso a casa: el científico realizó su doctorado en la Universidad Columbia y en el Museo de Historia Natural.

Por dijo que el descubrimiento reafirma el protagonismo de “la escuela de investigación paleontológica” de la Argentina, una de las mejoras de América latina, dijo, no sólo por su riqueza fosilífera sino por sus expertos.

“Es un dinosaurio que nos va a dar muchísimo, muchísimo para estudiar en los próximos años”, afirmó el paleontólogo. “Estamos en las etapas iniciales del estudio científico, de qué podemos entender de este animal, pero creo que en la próxima década vamos a tener numerosos estudios focalizados en la información que nos da este dinosaurio”, agregó.

Alrededor del titanousaurio hay varias placas con información sobre el animal, y una que replica varias de las preguntas que Pol y otros científicos intentarán responder: ¿se escondía de los predadores?¿cuántos años vivió?¿cuántas crías tuvo?¿cuánto necesitaba comer para moverse?

“Ser gigante trae muchísimas complicaciones”, explicó. “Todas esas son preguntas que vamos a poder responder ahora que por primera vez conocemos un esqueleto los suficientemente completo de un animal de este tamaño.”