Un informe destaca que lo que más incomoda es que un comensal “mire permanentemente el celular”.
Muchas de las nuevas costumbres tecnológicas pueden resultar molestas. Las selfies, las interrupciones permanentes, WhatsApp que no para o hasta los Pokémon (?).
Un informe de D’Alessio IROL, con una muestra de 400 casos a nivel nacional, revela que lo que más incomoda a los argentinos en la mesa festiva es que otra persona mire permanentemente el celular.
Esa opción recibió el 64% de los votos. Le siguen “que comente en las redes todo lo que hace”, el etiquetado de fotos comiendo o bebiendo y, lo más original de todo, que cace pokemones (!).
Por supuesto que hay otras cosas que molestan en las cenas, como la desesperación por la falta de WiFi, el que cancherea porque tiene un celular nuevo o que uno se deprima porque no le contestan un WhatsApp.