Es el dueño de uno de los burdeles más grandes de San Pablo, y le critican que sus anuncios degradan a las mujeres.
Después de festejar la detención de Luiz Inácio Lula da Silva regalando cerveza, Oscar Maroni, dueño del burdel más grande de Sao Paulo, se presentó como candidato a Diputado nacional.
Fiel a su estilo, lo hizo con unos spots sexistas y chabacanos que fueron censurados este viernes porque degradan a las mujeres, a quienes presenta como “mercadería destinada a la satisfacción del deseo”.
Prometió birra si mentían en cana a Lula y cumplió.
Ahora Maroni, dueño de un importante cabaret paulista, va por la diputación.
Somos Suecia. pic.twitter.com/1FC0oFVhen— Santiago Rodriguez R (@srodriguezrey) September 6, 2018