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Beatriz Sarlo sobre Cambiemos: “Me gustaría saber qué aprendieron, además de timbrear”

La periodista cuestionó las estrategias comunicacionales de la política argentina: “En los países que nosotros respetamos, los discursos presidenciales no son reemplazados por mensajes de Twitter”.

La periodista y ensayista Beatriz Sarlo analizó la actualidad politica y se centró en los desafíos comunicacionales del mundo de la política. En una entrevista en el programa “Animales sueltos” de Alejandro Fantino, destacó que el presidente Mauricio Macri “no tiene formación política” pero que su Gobierno ofrece “una nueva forma de hacer política”. Resaltó, sin embargo que le “gustaría verlos en diez años para comprobar qué aprendieron, además de timbrear”. La política es un aprendizaje permanente. Lo que tuvo que aprender aceleradamente Alfonsín en los dos primeros años de gobierno fue enorme”.

“El discurso presidencial es la forma en que un presidente se comunica con los ciudadanos”, dijo Sarlo. “El discurso tiene que ser pensado, tiene que comunicar exactamente lo que el presidente quiere. En los países que nosotros respetamos, los discursos presidenciales no son reemplazados por mensajes de Twitter. Los presidentes hablan y dan discursos que tienen peso ideológico y político”. “Los políticos con responsabilidades de gobierno tendrían que ser muy prudentes para no bajar línea en Twitter sino públicamente”, recomendó  antes de agregar que el presidente estadounidense Donald Trump “es un ejemplo de la imprudencia en Twitter” porque “tuitea barbaridades de manera permanente”.

Refiriéndose al uso que los políticos argentinos hacen de las redes sociales para generar debate y mostrar su trabajo, hizo una comparación con el presidente francés: “Los discursos de [Emanuel] Macron son muy cultos, es posible que en este momento Macron sea uno de los presidentes más cultos. Es graduado de una de las mejores escuelas de formación que hay en Francia. Para la foto presidencial, eligió estar en su escritorio con dos grandes novelas francesas del siglo XIX. Ese es el mensaje que comunicó: su respeto por la gran tradición cultural francesa”.