Chubut Para Todos

Premios Turro 2015 Por Alejandro Borensztein

“Cuando agobian los calores estivales, no importa cuántas retamas pierdan su amarillo, ni cuántos lupines diluyan su violáceo, ni cuántos hijos de puta abandonen un gobierno. Siempre habrá lavandas moradas reemplazando lupines y retamas y, por supuesto, el Club de los Malos siempre dispondrá de una suficiente cantidad de turros para suceder a aquellos que partan hacia el ostracismo”.

Con esta temeraria frase, el CEO del Club de los Malos sintetizó el pasado, el presente y el futuro de la institución y le dio la bienvenida a los jerarcas invitados a la tradicional gala de fin de año y entrega de los Premios Turro 2015.

En esta ocasión, la fiesta se llevó a cabo en uno de nuestros bastiones del Mal: el hotel Alto Calafate. Obviamente, todos los gastos corrieron por cuenta de Lázaro Báez. “Tenemos ocupación plena de verdad, no vamos a poder lavar nada, Jaaaa!!”, bromeó el conductor del evento desde el escenario.

Más allá de la alegría navideña, flotaba en el aire la sensación del deber cumplido: finalmente el Club de los Malos demolió al kirchnerismo. Objetivo alcanzado.

Sin embargo, muchos jerarcas se mostraban preocupados por el futuro. ¿Cuáles serán los operativos que el CDLM tiene preparado para devastar al gobierno del Presidente Macri? ¿Cómo es el cronograma de turradas que están planificando los Altos Mandos?

¿Aprovecharemos, una vez más, la impericia de los marketineros que abundan en el PRO? ¿O bombardearemos la coalición Cambiemos utilizando la vocación autodestructiva radical que tantas satisfacciones nos dio en el pasado? ¿Cuál será el momento y el lugar exacto en que haremos detonar a la Doctora Carrió?

Lo aconsejable en el inicio es golpear de entrada y esperar. Haber convencido al nuevo Presidente de designar jueces de la Corte por decreto, fue una jugada del CDLM que nos sirvió para medir al nuevo gobierno. Una simple escaramuza para ver cómo reaccionaba el enemigo. El tiempo irá ajustando la estrategia de devastación.

Mientras tanto, la atención estaba puesta en los premios y los nominados. ¿Quién se alzaría con el Turro de Oro 2015? Los primeros aplausos de la noche fueron para el ganador del Premio Turro a la Mejor Labor Deportiva. Luis Segura se llevó la estatuilla en representación de los dirigentes del fútbol que organizaron las elecciones en la AFA, cuyas vitrinas están repletas de Premios Turro.

Luego, llegó el turno de la Mejor Labor Económica. Axel Kicillof estaba nominado, no sólo por su invalorable aporte al proceso inflacionario o por haber devaluado la moneda un 56,3%, sino porque después de hacerlo, declaró: “Los precios no dependen de la cotización del dólar” (26/1/2014 en Página/12). Dos años después, le hicimos decir todo lo contrario. Se merecía aplauso, medalla, beso y terrón de azucar.

Sin embargo, el ganador fue el ex presidente del Banco Central, Vanoli, por su contribución el vaciamiento de la entidad y la estafa con el dólar futuro. Le dedicó la estatuilla a Moreno, padre de la epopeya económica kirchnerista.

La noche seguía ofreciendo ganadores. Mejor Traición fue para Mónica López. Mejor Labor en Redes Sociales fue para la responsable kirchnerista de la cuenta oficial Casa Rosada, una tal Ana Montanaro quien, luego del accidente de los gendarmes en Salta tuiteó: “4to dia de Macri Presidente, 42 muertos”. Una muchacha con un gran potencial.

Randazzo se llevó el Premio Revelación, mientras Alperovich y los socialistas santafecinos compartieron el premio a la Mejor Labor en Escrutinios.

Como todos los años, se hizo un homenaje a la trayectoria. Esta vez no se homenajeó a un turro en particular, sino a la histórica utilización de los medios de comunicación del Estado por parte de los gobiernos para hacer propaganda política. Una actividad fascista que viene de lejos.
Para entregar el “Mussolini de Bronce” subieron al escenario varios referentes de distintas épocas. Allí estaba Osvaldo Papaleo, responsable de inolvidables censuras, prohibiciones y clausuras de medios durante el gobierno de Isabelita. También los militares que ocuparon los medios durante el Proceso, un general por Canal 7 y Canal 9, un almirante por Canal 13 y un brigadier por Canal 11 (así se habían repartido los canales entre las fuerzas). Acompañaban un par de dirigentes de la Coordinadora radical que, entre 1987 y 1989, terminaron manipulando los medios. Y por supuesto, todo el Sofovichismo de los ’90.

Completaban el grupete, los responsables de estas mismas políticas durante el kirchnerismo: Aníbal Fernández, Abal Medina, Scoccimarro y varios comisarios políticos de la Cámpora.

Recibió el “Mussolini de Bronce” un soldado en la utilización de medios públicos para propaganda de un gobierno: Diego Gvirtz. Ovación para este titán del neofascismo que el Club de los Malos utilizó para envenenar a la sociedad y, de paso, destruir a su propio gobierno. Sus escraches públicos desde el Estado serán mucho más recordados que cualquier logro del kirchnerismo.

Pero el momento más emotivo de la noche fue cuando se anunció el Turro de Oro 2015: Cristina Fernández de Kirchner. Merecidísimo. Sin duda, de los ocho años, el último fue el mejor. Desde la planificada destrucción de su candidato Scioli al despecho final con Macri pasando por la catástrofe electoral en la Provincia de Buenos Aires, y la caterva de iniquidades que dejaron como herencia. Visto a la distancia, cuando arrancó no imaginábamos un cuadro del CDLM tan efectivo.

Al mismo tiempo que la ganadora agradecía, sonó la sirena de medianoche y el inicio de la tradicional “ceremonia dorada”.

Es el momento en el que todos los guachos del CDLM, a lo largo y a lo ancho del país, corren hacia las terrazas de sus edificios para así, braguetas en mano y al grito de “¡¡meadlos y marcad territorio!!”, orinen sobre los ingenuos corderitos de Dios.

Felices desconocedores de la razón de sus tragedias. Creen que sus diarias penurias son producto de la impericia ajena o de la fatalidad. Se sienten meados por los perros cuando, en realidad, todo lo que les sucede es obra de nuestra organización. Las cosas son como son porque nosotros hacemos lo que hacemos.

Mientras las bendiciones del Mal llovían desde los cielos de la Patria, la ganadora del Turro de Oro 2015 seguía con un discurso que ya nadie escuchaba.

Dicen los mozos que habló hasta la salida del Sol. No lo sabemos. Nosotros nos fuimos a dormir. A juntar fuerzas. A prepararnos. Un nuevo gobierno ha comenzado. No saben la que les espera.